De presencia cosmopolita
sólo tu nombre resuena extranjero…
turista permanente en la plaza de mi pueblo.
Muchachas, zarapes y sombreros
prolongan largamente sus sombras
mientras que (desde lejanos ayeres)
alegre y sereno modulas
el ya de por sí lento y dulce
ir y venir de la banda:
“De la Sierra Morena,
Cielito Lindo, vienen bajando…”