No sé cuánto has llorado, la distancia no me permite ver tus ojos. Desearía poder abrazarte. Me gustaría pensar que eres feliz, que haces aquello que deseas y que de tu boca aún emergen las palabras espontaneas que soltabas sin detenerte, porque así eras tú; desconocías los límites si de vivir se tratase. ¿Aún lloras…
La vida tiene distintas maneras de pintarme el cielo. Mis ojos ya reconocen tantos colores, que el arcoíris casi me parece película en blanco y negro. ¿Qué destino nos espera ?, ¿ese que nos derrumba las emociones o ese que nos hace aspirar tan alto como si tuviésemos pájaros dando un sinfín de vueltas sobre…
El destino se vuelve tan astuto algunas veces, es confuso, peligroso, e incluso bueno con algunos. Conmigo solo cuenta chistes. Me toma de las manos con la esperanza de poder lanzarme contra la pared. Una lucha constante con la vida para que esta no me ahogue en desgracias intermitentes. Los manchones de sangre en mi…
Te enamoraste como hoy nadie lo hace, de esas veces donde tu corazón parece tener el control. Te hace escribir cartas y adorar sus ojos. Despiertas pensando en su voz, e incluso antes de dormir imaginar sus labios muy cerca de los tuyos. Se te desatan las pocas mariposas que quedan. Le dedicas cientos de…
Construí castillos de arena sobre grandes remolinos de viento. Mezcle el agua y aceite tantas veces que el tiempo se fue volando. Visité nuestro sitio favorito porque la desazón de tu ausencia me incineraba las emociones. Ahora estoy donde siempre quisiste, un poco cerca de tus labios y demasiado lejos de suceder. Te describiría como…
Me reía frente a la vista del atardecer, ¿Porqué no me advirtieron que no sería fácil? La facilidad con la que caí en tus aguas, y tu ni siquiera parecías un poco mojado. Sin embargo, como si de una aventura se tratase, acepté que me encantaba que el agua me empapara. No tenía mucho que…
¿Hay un infinito realmente? ¿Qué somos en este gran espacio? Te has creado más historias sentimentales que los libros que te has leído, te conseguiste tu propio País de las Maravillas y ahora no encuentras como salir de ahí, o es que simplemente te agrado el brillo de su cielo. ¿Es que acaso necesitas una…
Siempre hay una ventana por la cuál el aire se cuela con facilidad, con la cuál llega un poco de frío después de una larga tarde de ardimiento. Se te despliegan un poco las alas, y muy a pesar de no poder huír de la habitación donde te encuentras los pequeños rayos del amanecer aún…