Ahí estás tú, en el amanecer, dentro de mis silencios, en el cielo que miro, coloreando de bonitos recuerdos mis días grises, tristes y vacíos.
Ahí estás tú, en el canto de un pajarito, en la sonrisa de un niño, en los abrazos, en las estrellas que cuento, en los versos que escribo, en los que logro dar alas y en los que sólo pueden volar dentro de mi alma.
Ahí estás tú, en mis oraciones, dándole sentido a la palabra fe y esperanza.
Ahí estás tú, en mis sueños, en el café, en mi sonrisa, en mis lágrimas, en mi mente, en mis días de suerte y en los que siento que nada encaja.
Ahí estás tú, cerca y en la distancia, en mi mente, en mi corazón y sobre todo estás y estarás… en mi alma.
© Addel Córdova