No planeo quedarme en el fondo del abismo para siempre,
ni perder la vida dejándola escapar frente a mis ojos.
Lo volveré a intentar una y otra vez, de forma inquietante.
Que nadie sienta lástima por mi estado de vida y mente.
Marcaré en este punto una línea de un antes y un después de retornar, volveré a brillar intensamente.
Solo tendré la dirección de avanzar, así llueva y se haga un diluvio; así se queme el sendero y mi piel se chamusque.
Me demostraré que sí es posible todo lo que ayer entre la penumbra parecía inconcebible.
Difícilmente me verán decaer, no permitiré que mis ojos vuelvan a destilar dolor y tristeza, solo se empañarán de dicha y viveza.
No planeo quedarme aquí a esperar que sucedan los amaneceres, yo mismo encenderé un sol, y cada noche volveré a repasar la lista interminable de mis lúcidos anhelos.

-LF Medina