Danzaré bajo mi sol azafrán
Y, aparecerá de nuevo
mi voz al margen
de ese valle,
de esas lluvias
de silencios.
Me buscarán colores,
para pintar mi nuevo
universo y brillaré,
bailaré, frente al viejo
horizonte danzas
primigenias, regidas por el mismo dueño,
mi sol azafrán.
Fluirá mi consciencia,
siendo guerrera como consecuencia.
Crecida, me abriré
un nuevo destino…
Remedios G. Tenza