Que la soledad que me acompaña esta noche sea motivo para un buen vino y escribirle a tu ausencia, que tu aroma mujer, se quede en mí como se quedan los recuerdos que compartimos juntos.
Que mi cama no eche de menos tu presencia, que el insomnio no me alcance y mi almohada no me invite a soñarte.
Que tu corazón de hielo un día se muera y se vuelva fruto fresco para darle vida con mis besos.
© Addel Córdova
Deja una respuesta