Aunque estés ausente, te siento, adentro, muy adentro de mí, en mis sueños y en mis desvelos, en mi locura y en mi cordura, en las canciones y en los silencios. Porque ausente te encuentro, en la compañía y en la soledad, en mis lágrimas y en mis sonrisas, en las mañanas de sol y en las tardes de lluvia. Porque ausente te anhelo, mil y una noche, y si muero en el intento, de verte y de tenerte, en el más allá, te espero.
-LF Medina
Te espero

Deja una respuesta