LA CARRERA

 

LA CARRERA

Nadaba a toda velocidad, moviéndose como una aeronave que surca el espacio. Sabía que en este macabro juego no llegar el primero suponía perder la vida, por ello nada de mirar atrás, nada de pensar, sólo seguir adelante avanzando, esquivando como en un videojuego a sus rivales, que iba dejando por el camino… Sólo tenía una oportunidad y no iba a permitirse perderla.
Por el número de participantes, parecía impensable que llegase el primero en esta lucha a muerte, pero por ahora iba en cabeza. En breves momentos, un gemido de mujer satisfecha inundó la estancia y la noche aplaudió vida, justo cuando el afortunado espermatozoide fecundó el óvulo.

 

Eduardo Ramírez Moyano

Avatar de buhodespierto

Posted by

Deja una respuesta

Introduce tus datos o haz clic en un icono para iniciar sesión:

Logo de WordPress.com

Estás comentando usando tu cuenta de WordPress.com. Salir /  Cambiar )

Foto de Facebook

Estás comentando usando tu cuenta de Facebook. Salir /  Cambiar )

Conectando a %s

Este sitio usa Akismet para reducir el spam. Aprende cómo se procesan los datos de tus comentarios.

Crea un sitio web o blog en WordPress.com

A %d blogueros les gusta esto: