
MONODIÁLOGO
Con tanta sangre, me digo
y tantas lágrimas
¿Cómo puedes andar?
¡Tus pies deberían resbalar!
Con tantos estallidos
y tantos lamentos
¿Cómo pretendes entonces cantar?
¡Tu lengua deberías cortar!
Co tanto fango
y tanta tristeza
¿Cómo pretendes soñar?
¡Abre tus ojos a la realidad!
Con tanto trabajo alrededor
y tanto por ordenar
¿Cómo pretendes hoy descansar?
¡Ponte al servicio de los demás!
© Carmen Asceneth Castañeda
Crédito de imagen:
«El tiempo»
De: Oswaldo Guayasamín