EL VALS DE LAS MARIPOSAS
A las mariposas de alas blancas que brillan en todos los hospitales,
A su atención esperanzada por nosotros, tristes mortales…
Las bellas magas de la bata blanca,
que combaten los demonios de las fiebres con coraje.
Noche y día, vibran de vida los blancos luceros de sus sonrisas;
Día y noche, duermevela sin reproche; carrillos encarnados entre ajetreo y drenaje;
Iris de Cielo en diversidad: Castaño, negro azabache, azul paraíso…
Inmaculada tez natural. Si existe Dios, estoy en su piso,
mientras sus féminas de marfil danzan el vals de la vida para mí.
A las Hacedoras de Bien,
con sus frentes preocupadas y serenas a un tiempo.
Su amable ternura de miel,
siempre dispuestas entre el desafío y el desaliento.
sólo deseo volver a sentir su candor en mi piel
y perderme yo en su seno.
Eduardo Ramírez Moyano