¡
La magia de septiembre contamina mi vida
con esperanzas nuevas que disipan las tormentas
que amenazan con hundir mi barca cada día.
Septiembre es … como una madre que procura
mantener siempre encendida la luz de la ilusión
para ayudarme a caminar entre abrojos y zarzas.
Septiembre es el mes del sosiego y la esperanza,
de la confianza que dan las cosas bien hechas ,
que dan buenos frutos y buenas
cosechas recogidas.
Septiembre es esa mano amiga, que me ayuda,
que me incita a andar, a seguir adelante hasta el final,
a conseguir alcanzar -sana y salva- la otra orilla.
Septiembre, salvavidas que me mantiene a flote
sobre las aguas turbulentas de mi azarosa vida,
y que no permite que toque fondo todavía.
¡Septiembre, siempre septiembre!
(Marcamar)
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