
Obsidiana líquida
el mar mece mis sombras
caen destellos a mis pies.
Ópalo infinito
la noche se filtra
en mil caracolas.
Ayer es ámbar frente a mis ojos
te delinea el viento
te surca el agua
te guardas en mi soledad.
Cuarzo rosa mis manos
signo mi mente,
mi boca, mi sexo
y mi corazón.
Rezo despacio
rosario de arena
bendiciones de cristal.
Que allá y entonces el tiempo te salve
que aquí y ahora el horizonte me acoja
que en todo momento
y en cada lugar
una aguamarina nos limpie
y nos ampare
cobija de sal.
© Carmen Asceneth Castañeda